(ANS – Roma) – En la fiesta litúrgica de San Francisco de Sales, el Rector Mayor de los Salesianos, presidió la Eucaristía en la iglesia de la Casa General, recordando la figura y el valor del “docto humanista, gran director espiritual y generoso pastor” que inspiró a Don Bosco por su humanismo. Una meditación sobre la fuente del carisma salesiano.
La homilía de esta mañana realizada por Don Chávez fue una interesante reflexión sobre la figura del gran santo, pastor y doctor de la iglesia, elegido por Don Bosco como patrono de la Congregación salesiana y proponiéndolo como “modelo de celo pastoral, de bondad, de gran humanismo y de santo emprendimiento”.
Perteneciente a su propio contexto histórico y cultural, San Francesco de Sales “fue y continúa a ser un maestro de vida espiritual, rico de sabiduría, hecho todo para todos en la caridad pastoral, empeñado en “restaurar la unidad de los creyentes en el vínculo de la caridad y de la paz”. Para los salesianos “su celebración es una invitación a trabajar “en cada circunstancia de la vida, como emblema de la caridad benigna, paciente y dedicada, que permea de espíritu cristiano las estructuras eclesiales, sociales, políticas, económicas y culturales para hacerlas más humanas”.
Esbozando brevemente el perfil biográfico, el Rector Mayor manifestó la gran determinación del santo en su propia vocación, una vez descubierta, y la gran dedicación como pastor. “A través de sus múltiples actividades educó el pueblo cristiano y le mostró que la santidad es alcanzable en cualquier estado de vida, dando lugar a una nueva espiritualidad”. A pesar de la incansable labor, el obispo de Ginebra encontraba el tiempo para llevar a delante una voluminosa correspondencia y para escribir obras maestras como guía espiritual: “Introducción a la vida devota”, “Tratado del amor de Dios”, “Conferencias Espirituales”.
Para los salesianos – recordó Don Chávez – San Francisco de Sales se presenta como modelo en el cual inspirarse por su gentileza, bondad y humildad hacia cualquier persona. Citando el artículo 17 de las Constituciones Salesianas el Rector Mayor recordó como el salesianos ”cree en los dones personales y sobrenaturales del hombre, sin ignorar su debilidad. Acepta los valores del mundo y no se lamenta de su tiempo: toma aquello que es bueno, especialmente si le gusta a los jóvenes. Anuncia la Buena Noticia y siempre está feliz. Trasmite gozo y alegría en educar hacia la vida cristiana y el sentido de la felicidad: “Servimos al Señor en Santa Alegría”.
La figura de San Francisco de Sales es para redescubrir y valorar, sobre todo en este primer año del trienio de preparación al bicentenario del nacimiento de Don Bosco; “Pidamos al Señor la gracia de descubrir y hacer nuestras las grandes virtudes de San Francisco de Sales, aquellas que llevaron a nuestro padre a elegirlo como suyo y nuestro modelo”.
El texto integral de la homilía está disponible.