(ANS – Bilbao) – El 1 de mayo la urna de Don Bosco hizo su arribo a la Ciudad de Bilbao, en Deusto, y así comenzó su recorrido por toda la España Salesiana. ¡Bienvenido a casa! Era la expresión repetida en todo momento. El primer día concluyó con la Eucaristía presidida por el obispo de Bilbao, Monseñor Mario Iceta: “hay que buscar a los jóvenes, como lo hizo Don Bosco, un lugar coherente donde vivir y crecer. Están a la intemperie y en absoluta contradicción”.
En la recepción participaron los Inspectores de Sevilla, León, Madrid y Bilbao, Salesianos e Hijas de María Auxiliadora, un grupo importante de miembros de la Familia Salesiana de toda la Inspectoría, amigos de Don Bosco, profesores, padres de familia, alumnos/as del centro Deusto.
La Familia Salesiana de Bilbao se había dado cita en Deusto desde la mañana para compartir, reflexionar, hacer experiencia de familia, contar la vida. La animación estaba a cargo del vicario de la Inspectoría de León, padre Eusebio Martínez Aguado quien propuso la Carta de Identidad de la Familia Salesiana como elemento de reflexión.
El Inspector de Bilbao padre Félix Urra, el director de Salesianos Deusto padre Isaac Diez, el vicario inspectorial padre Sebastián Muñoz y el director de la Casa Inspectorial padre Juan Ángel Rad a los pies de la estatua de Don Bosco recibieron la urna-reliquia de San Juan Bosco. Dos alumnos del centro Deusto realizaban el baile de bienvenida: el “aurresku”.
Posteriormente, en procesión la urna hizo su entrada solemne en la iglesia de María Auxiliadora con una recepción solemne ante el altar. El coro del centro interpretó algunas canciones mientras la urna era rodeada de los invitados principales, representantes de los diferentes grupos de la familia salesiana y la comunidad educativa. Terminada la recepción la urna-reliquia ha quedado expuesta en el templo para su veneración. En la recepción estuvieron presentes diversos medios de comunicación y las redes sociales han trasmitido algunos de los momentos vividos.
A las 19:30 de la noche de dio inicio a misa solemne presidida por el obispo de Bilbao, con una iglesia colmada de fieles. Esta vez la música estuvo a cargo del coro de adultos. Durante la Homilía Mons. Mario Iceta manifestó “hay que buscar a los jóvenes, como lo hizo Don Bosco, brindarles un lugar coherente donde vivir y crecer. Están a la intemperie y en absoluta contradicción”. En la presentación de las ofrendas: la luz y la sal del mundo, representada los 50 años que celebra la Inspectoría, tierra de tantos testigos y de tantas vocaciones salesianas.