(ANS – Cúcuta) – En respuesta al llamado del Papa Francisco y de Madre Yvonne Reungoat, Madre General de las Hijas de María Auxiliadora (FMA), las comunidades de las FMA de la Inspectoria “Ntra.Señora de las Nieves” están llevando a cabo acciones concretas a favor de los inmigrantes y refugiados.
En Colombia, se da una situación algo parecida a la que se está viviendo en Europa, aunque en menores proporciones. A finales del mes de agosto de 2015, el cierre de la frontera con Venezuela ordenada por el Presidente del vecino país Nicolás Maduro y la deportación de muchos compatriotas que vivían en algunos casos desde hace muchos años en ese país, ocasionó una grave emergencia humanitaria en la ciudad fronteriza de Cúcuta y en otras regiones de Colombia.
Alrededor de 2000 personas fueron deportadas por Venezuela y más de 7000 abandonaron voluntariamente el país vecino por temor a correr la misma suerte. El cierre de la frontera ha provocado además la separación de muchas familias que tienen miembros de nacionalidad colombiana y best online casino venezolana. Los albergues organizados por el gobierno, por la Iglesia y por otras entidades se han quedado insuficientes ante el alto número de deportados.
Como expresión de solidaridad ante esta grave situación, en todas las comunidades educativas de la Inspectoría se realizaron campañas con el fin de recoger recursos que permitieran aportar un grano de arena en apoyo a nuestros hermanos tan necesitados.
La contribución ha sido fruto de acciones de austeridad y renuncias comunitarias como el ahorro en el uso del teléfono, renuncia semanal a algún alimento, renuncia a algunos detalles tradicionales de Navidad. De esta campaña se hizo partícipe a las estudiantes, a los profesores, a los padres de familia y en algunos casos a la gente de los alrededores que participan en la eucaristía dominical en nuestras casas.
Los recursos enviados sumaron en total ocho millones de pesos – $ 8.000.000; este dinero fue recogido en el Economato Inspectorial y enviado a las Hermanas de la Inspectoría María Auxiliadora de Medellín CMA, que tiene casas ubicadas en Cúcuta y en otros lugares de la frontera y que conocen de forma directa las múltiples necesidades de los deportados y la forma más adecuada de atenderlas. Además de los recursos económicos algunas comunidades enviaron también utensilios de aseo y vestuarios.