En estos días sale a la luz un texto, renovado, de Don Egidio Viganò, VII Sucesor de Don Bosco que guió a la Congregación Salesiana, con el título: L’interiorità apostolica. Riflessioni sulla “grazia di unità” come sorgente di carità postorale, (La interioridad apostólica. Reflexiones sobre la “gracia de unidad” como manantial de la caridad pastoral) (LDC, Turín 2020). El texto lleva el prefacio del padre Ángel Fernández Artime (X sucesor de Don Bosco), y el epílogo del padre Pascual Chávez (IX sucesor) y una contribución del Don Juan Edmundo Vecchi (VIII sucesor). Hemos entrevistado al curador del libro, el padre Rossano Sala, docente de la Universidad Pontificia Salesiana, director de la revista Note di pastorale giovanile y secretario especial emérito del Sínodo para los Jóvenes.
¿Cómo nace la idea de este libro?
En el 2020 se cumple el centenario del nacimiento y el 25 aniversario del fallecimiento de Don Viganó. Por ello el Rector Mayor ha pedido recordar y actualizar su figura.
¿Por qué se decidió publicar nuevamente este texto de Don Viganó?
Porque recoge lo mejor del pensamiento y de la propuesta apostólica de Don Viganó para la Congregación y la Familia Salesiana. Hoy corremos el peligro -más que nunca- de perder nuestra identidad carismática. Recuperar la “interioridad apostólica” a través de la “gracia de unidad” es estratégico y decisivo.
¿Qué se entiende por “gracia de la unidad”?
La vida salesiana es activa, dinámica, creativa, apostólica. Los riesgos son la disipación y el activismo, la superficialidad y la mediocridad espiritual. “Gracia de unidad” significa que nosotros somos lo que somos solamente si permanecemos unidos a Dios. Significa que ser activos no es lo opuesto de ser contemplativos y viceversa: esto es evidente en la vida de Jesús, que unía la acción apostólica con la oración en el monte. Y es claro que también Don Bosco ha encontrado siempre en la unión con Dios la fuente de la acción apostólica.
¿Hay que partir siempre de Don Bosco como un hombre de Dios?
Seguramente sí, el secreto de Don Bosco está en su vida interior, en su “interioridad apostólica”. ¡La unión con Dios está en la raíz de cada acción apostólica!
¿Qué ha pedido a los tres Rectores Mayores que intervinieron en el libro?
A Don Ángel solamente el prefacio, ¡ya tiene demasiado que hacer en estos tiempos de pandemia! He pensado en cambio de volver a publicar una hermosa y poco conocida carta circular de Don Vecchi (ACG 354), que retoma la identidad del consagrado salesiano a partir de las tantas cartas de su predecesor. Al padre Chávez en el epílogo del libro, actualizar el largo y fructífero magisterio del padre Viganó, para el ‘hoy’ de nuestra vida de consagrados y apóstoles de los jóvenes.
¿Qué se espera de este libro?
El Rector Mayor ha regalado una copia del texto a todas las Inspectorías, a todas las casas de formación, a todos los grupos de la Familia Salesiana y pidió al editor italiano que ofrezca gratuitamente los derechos de autor para eventuales traducciones en otros idiomas. El deseo no es simplemente el de difundir el libro y traducirlo, sino de ayudar a cada consagrado salesiano y a cada miembro de la Familia Salesiana a vivir plenamente la propia vocación.
Fuente: Agenzia Info Salesiana