Luego de 2 días de trabajo, la Asamblea de Hermanos 2021 concluyó con la celebración de la Misa de Acción de Gracias y la Clausura de la Visita Extraordinaria del Consejero Regional de Interamérica, el Padre Hugo Orozco sdb.
La mañana del martes 23 de noviembre los Salesianos de Don Bosco se reunieron en el auditorio del Colegio Salesiano San Francisco de Sales para dar los últimos repasos a lo expuesto durante el primer día de la Asamblea. Compartieron sus reflexiones y apreciaciones reunidos en grupos de trabajo para luego compartirlas en comunidad.
A manera de cierre de este fraterno encuentro, se celebró la Misa de Acción de Gracias, presidida por el Padre Hugo Orozco, en la Basílica de María Auxiliadora donde participaron los más de 50 salesianos presentes durante la Asamblea. Durante los últimos minutos de su homilía, el Padre Hugo aprovechó para dirigir unas palabras de agradecimiento y despedida luego de 3 meses de visita por tierras peruanas.
Agradezco mucho a todos mis hermanos, al Padre Manolo, a todos los miembros de la familia salesiana que han sido muy lindos; en todo momento y todo lugar han tenido gestos de afecto muy bonitos. Me encomiendo mucho a su oración. Le pido mucho a María Auxiliadora que nos auxilie, que nos acompañe, que nos enseñe a confiar, a agradecer, a alabar y a comprometer nuestras vidas en favor de la salvación de los jóvenes. Gracias.
No faltaron los aplausos de sus hermanos y de los feligreses presentes, además de las palabras de afecto de las personas que estuvieron conectadas a la transmisión en vivo de la Eucaristía.
Antes de finalizar la celebración, el Padre Manuel Cayo sdb tomó la palabra para expresar un “gracias” sincero al Padre Hugo por el tiempo dedicado a conocer a la familia salesiana del Perú.
Hoy me toca ser portavoz de todos ustedes, de todos mis hermanos y de toda la gente que ha gozado de estos días de visita. Querido Hugo, querido Padre “pollo”, has llegado hace más de 3
meses enviado por Don Ángel Fernández para regalarnos en su nombre esta visita que nos ha animado, acompañado e impulsado por los caminos de la fidelidad a Jesús por las huellas del carisma salesiano. Antes de tu regreso, 24 día de la Auxiliadora, en nombre de tantos jóvenes, de tantos laicos con quienes has compartido y con quienes compartimos vida y misión quiero decirte muchísimas gracias hermano. Gracias porque has sido un verdadero padre, hermano y amigo; gracias porque nos has dejado entusiasmar por la llamada primera, por ese amor gratuito de Jesús que nos convocó a ser signos de su amor a los jóvenes. Gracias porque ofreciste todo el tiempo necesario para cada uno de nosotros, porque desde tu caridad y claridad no dudaste en señalar los desafíos, límites, invitaciones y cambios que tenemos que asumir con verdadero espíritu de conversión. Gracias por tu sencillez de hermano peregrino que se encariñó en cada casa, pueblo y región. Gracias porque nos hablaste de Don Bosco como un hijo habla de su padre invitándonos con insistencia a no olvidarnos de su legado, recordándonos que la mejor manera de evocarlo hoy es haciendo realidad el sacramento de la presencia en medio de los jóvenes. Gracias porque en este año de la esperanza tu visita nos ayuda a transitar esta nueva etapa con un renovado entusiasmo y compromiso. Querido hermano te encomendamos a la Auxiliadora desde esta su casa limeña. No lo olvides, esta es tu casa, Dios te bendiga pollo querido, padre hermano y amigo.
Con esas sabias y cálidas palabras concluyó la celebración, cargada de aplausos y con los corazones contentos.
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