#AñoDeLaOración: El Papa nos recuerda que necesitamos espacios de silencio
Redactado por: Vaticans New
En este Año de la Oración en el que nos encontramos, en Vatican News echamos la mirada hacia el 2020, año en el que el Papa Francisco dedicó, durante sus Audiencias Generales de los miércoles, un ciclo de catequesis para reflexionar sobre “la oración”. En este ciclo, el Pontífice nos regaló frases muy útiles para prepararnos este año para el Jubileo 2025.
Mireia Bonilla – Ciudad del Vaticano
Todo el 2024 está dedicado a la oración, a entender cómo se reza, a buscar con más frecuencia ese momento íntimo con Dios y es por ello que el Papa Francisco nos llama este año a aumentar el rezo para prepararnos espiritualmente al Jubileo del año que viene. El Papa nos presentó – en una de sus catequesis del año 2020 – a Jesús “como el maestro que, con su ejemplo, nos enseña a orar”. Es interesante ver como Jesús en los momentos de mayor entrega a los pobres y a los enfermos, siempre dedicó tiempos para la oración, para retirarse y estar a solas con el Padre y acoger su voluntad. “El ejemplo de Jesús nos lleva a deducir algunas características de la oración cristiana. Sobre todo, es un medio para ofrecer a Dios toda la jornada, nos dispone a la escucha y al encuentro con Él, nos abre un horizonte grande y nos ensancha el corazón” dijo el Pontífice.
Francisco, en esta catequesis, también recuerda que la oración «es un arte» que se debe practicar con insistencia y perseverancia: “Requiere una disciplina, un ejercicio y produce en nosotros una trasformación progresiva: nos hace fuertes en la tribulación y nos da la gracia de estar sostenidos por Aquel que nos ama y nos protege siempre”.
Otra característica que señala el Papa de la oración es la soledad. Esto no significa evadirse del mundo, sino encontrar un espacio de silencio para encontrar el sentido a lo que hacemos: “Todos necesitamos un espacio de silencio para cultivar la propia vida interior y encontrar el sentido a lo que hacemos. Sin vida interior nos volvemos superficiales, inquietos, ansiosos; huimos de la realidad y huimos de nosotros mismos” explicó el Papa.
Pero quizás, la característica principal de la oración, es que nos ayuda a percibir que todo viene de Dios y que debemos abandonarnos en las manos del Padre”.