El Cardenal Arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela, ha señalado que a el le gustaría que de la Jornada Mundial de la Juventud salieran 500.000 matrimonios y ha asegurado que surgirán decenas de miles de vocaciones.
En una entrevista realizada en la Cope y recogida por Europa Press, Rouco ha explicado que «los frutos» que espera el Papa de esta JMJ se pueden concretar en que para muchos jóvenes «va a ser el sí definitivo a la vocación cristiana que han recibido». Asimismo, ha indicado que hay distintas variantes en el grupo de jóvenes.
En este sentido, ha añadido que están los chicos que están muy al margen de la vida de Fe y la vida cristiana y de participar realidad de la Iglesia y que para ellos «va a ser un hueco muy grande en su vida», también para los que están en una posición de «tibieza» va a suponer «fervorizarse de nuevo con el don que han recibido en sus vidas», y finalmente, para muchos «va a ser el día que su vocación dentro de la comunión y de la vida de la Iglesia va a clarificarse».
En esa línea, Rouco ha recordado que si el señor te pide que seas sacerdote, dile que sí, si te pide que te consagres a él, dile que sí, y si te pide que no tengas miedo a dar el si al matrimonio cristiano con tu novia y fundar descendencia, dile que sí.
A su juicio, el papel de España en esta JMJ es «poner la nota de la catolicidad», que, según ha explicado, «si se entiende a fondo significa plenitud, aceptación y afirmación en la vida de la vocación cristiana» y ha añadido que «ser católico es vivir cristianamente de forma plena». Además, ha señalado que también significa «llevar el sentido de unidad y comunión con el Papa al corazón mismo de la vida de la Iglesia y por tanto con fuerza misionera al mundo».
Rouco ha recordado que en la Iglesia española no ha habido ninguna escisión digna de ser nombrada con respecto a la gran comunión de la Iglesia y que «sus fieles nunca se han quedado en casa y se han limitado a ser más o menos protagonistas de una vida personal o de grupo en pequeño, sino que han salido siempre al mundo y han sido grandes misioneros». Además, ha puntualizado que «todavía hoy la presencia misionera de los fieles católicos de España en el mundo es inmensa, probablemente la más importante de todas».