Ciento sesenta reliquias con pequeñísimos fragmentos de la osamenta del beato Dr. José Gregorio Hernández fueron confeccionadas con devoción y delicadeza por las Hermanas Siervas de Jesús, una congregación fundada por la beata, también venezolana, Madre Carmen Rendiles. Ya están listas para ser distribuidas dentro y fuera de Venezuela, porque la fama de santidad del futuro beato ha atravesado las fronteras, sobre todo, para pedir su intervención milagrosa en los quebrantos de salud, en las tribulaciones de la enfermedad y cuando la muerte acecha.
El viernes, 30 de abril, culminada la ceremonia de beatificación, serán enarboladas muchas de esta reliquias en santuarios y parroquias, incluso en los muchos templos aún inexistentes, que seguramente serán intitulados al beato “Médico de los pobres”. Las encargó el cardenal Baltazar Porras, arzobispo de Mérida y Administrador apostólico de Caracas, “para que haya una reliquia de la osamenta del beato en todas las diócesis y parroquias”. Eso refirió monseñor Tulio Ramírez, Obispo de Guarenas y Vice postulador de la Causa de Beatificación y Canonización del Dr. José Gregorio Hernández, en un video de presentación de las reliquias junto a las hermanas Siervas de Jesús.
Fuente: Vatican News