Este verano, 42 jóvenes entre los 14 y 16 años del movimiento «Ephata Don Bosco» han ido en peregrinación a los lugares de Don Bosco y María Dominga Mazzarello en bicicleta.
Partiendo el 14 de julio de Farnières, el grupo ha recorrido 700 km en unos quince de días alternando tramos de camino en autobuses y otros en bicicleta. Los acompañaban un equipo compuesto por 14 jóvenes adultos, mecánicos y una cocina itinerante; en total 63 personas, entre las cuales tres salesianos: un sacerdote y dos jóvenes en formación.
Carmagnola, Mornese, Asti, Colle Don Bosco y Turín fueron algunas etapas de la peregrinación que se ha concluído el 30 de julio con el regreso a Farnières. El esfuerzo físico ha sido inmenso y no menos el camino espiritual cumplido por los jóvenes a medida que avanzaban en el camino. Cada jornada se iniciaba con una oración de la mañana a la que seguía la «siembra», la propuesta de un tema y una reflexión. Por la tarde los ciclistas, haciendo una parada, se reunían en pequeños grupos, llamados «encrucijada», para discutir el tema del día. Por la tarde estaba la «cosecha»: los jóvenes compartían las propias reflexiones con dibujos y gestos que enriquecían la celebración conclusiva.
El movimiento «Ephata Don Bosco» ha nacido hace más de treinta años cuando los Salesianos de Bélgica francófona reunieron a algunos jóvenes de 16 años en adelante para un camino espiritual en perspectiva vocacional. En 1986 se constituyó la franja de los chicos de 14 a 16 años. El movimiento propone un camino a traves de tres encuentros durante el año y, en verano, un campo escuela espiritual que consiste en una peregrinación en bicicleta y un camping en años alternos. Desde 1988, primer centenario de la muerte de Don Bosco, la peregrinación en bicicleta se realiza a los lugares de Don Bosco durante los cuales los jóvenes pueden descubrir y conocer la vida y la espiritualidad del fundador de los Salesianos. En los últimos años la peregrinación se ha desarrollado por dos veces a lo largo del camino de Santiago, en los lugares de San Francisco de Sales y a Saintes Maries de la Mer, en las cercanías de Marsella.
