El Santo Padre ha nombrado obispo auxiliar de la archidiócesis metropolitana de Cochabamba (Bolivia) al reverendo Víctor Iván Vargas Galarza, miembro del clero de la misma archidiócesis, hasta ahora párroco de San Ildefonso en Quillacollo y rector del santuario arquidiocesano Vírgen María de Urkupiña, asignándole la sede titular de Bladia. Así lo informa, a través de un comunicado, la oficina de prensa de la Santa Sede.
Monseñor Víctor Iván Vargas Galarza nació el 14 de diciembre de 1968 en Cochabamba. Fue ordenado sacerdote el 10 de mayo de 1997 para la misma archidiócesis.
Cursó el año propedéutico en el Seminario San Cristóbal de Sucre (1989) y estudios de Filosofía y Teología en el Seminario Nacional San José de Cochabamba (1990-1995). Obtuvo la Licenciatura en Teología Litúrgica en la Facultad de Teología de Cataluña en Barcelona, España (2007).
Asimismo, ha ocupado los siguientes cargos: Vicario parroquial de San Ildefonso en Quillacollo (1998-2000)(2007-2012); vicario parroquial de San Juan Bautista en Punata (2000-2001); formador en el Seminario Nacional San José en Cochabamba (2001-2004); asistente diocesano de las Comunidades Eclesiales de Base (2003-2008); vicario foráneo de Valle Bajo (2008-2010); asesor de la Comisión archidiocesana de Liturgia (2009-2021) y párroco de San Miguel en Tiquipaya (2012-2021). Hasta ahora ha sido párroco de San Ildefonso en Quillacollo y rector del santuario arquidiocesano Virgen María de Urkupiña.
Monseñor Vargas: «Estoy muy agradecido con Dios»
Por otra parte, tal como informa un artículo publicado hoy en la página web del Episcopado boliviano Iglesia Viva, el reverendo Vargas ha expresado su agradecimiento a Dios y a sus hermanos por la confianza: “Yo padre Iván Vargas, me siento muy agradecido a Dios, porque siempre me sentí bendecido y favorecido por Él. En 24 años de sacerdote, nunca me imaginé que había ojos puestos en mi humilde persona para concederme esta gracia divina de llegar a ser obispo”, afirma.
En su mensaje padre Víctor desea la bendición para todo el pueblo de Dios, especialmente a la tierra de Cochabamba y alienta a los feligreses a tener confianza y fe en el Señor en estos tiempos difíciles: “Todos tenemos que descubrir que Dios nos ama, la vida es bella…Dios está con nosotros, no nos abandona, tengamos fe en Dios, no vacilemos en nuestra fe, confiemos en el Señor”.
Fuente: Vatican News
