En la noche del 1 al 2 de agosto, el X Sucesor de Don Bosco, P. Ángel Fernández Artime llegó a Porto Alegre, para iniciar la Visita de Animación en la Inspectoría “San Pío X” de Brasil-Porto Alegre (BPA). El Rector Mayor fue recibido en el aeropuerto por el Inspector de Porto Alegre P. Asídio Deretti, por los miembros del Consejo Inspectorial, por los aspirantes salesianos de la casa de Viamão, un grupo de Hijas de María Auxiliadora y algunas personas de Massaranduba.
En la mañana del día de ayer 2 de agosto, el Rector Mayor se reunió, en la Casa Inspectorial, con el Consejo Inspectorial de BPA, para conocer los desafíos y los proyectos, y presentar las perspectivas y las directrices del Consejo General.
Por la tarde, en presencia de su secretario el P. Horacio López, el Rector Mayor fue a Viamão, una ciudad cerca de Porto Alegre, para realizar una visita donde trabajan los salesianos. De hecho, los hijos de Don Bosco trabajan en el campo social y realizan la prevención y la recuperación a los niños de la calle y a muchachos con problemas. Por otro lado, en ese lugar existe una casa salesiana donde se alberga a los salesianos ancianos o enfermos a quienes saludó con la cordialidad de un padre.
Dirigiéndose a los salesianos ancianos, el X Sucesor de Don Bosco les recordó que, a pesar de que ya no pueden estar en el patio, en medio de los muchachos y niños, siempre se puede tener en el corazón a los destinatarios y se puede beneficiar a través de la oración de todos los días.
En esta visita oficial a la obra social, el Rector Mayor fue recibido calurosamente por los estudiantes y por los educadores, quienes manifestaron la alegría de la presencia del Sucesor de Don Bosco a través de canciones y bailes realizados por los alumnos del taller “baile de la calle”. El Rector Mayor les alentó a aprovechar las oportunidades de formación y desarrollo humano que los salesianos les ofrecen, de manera que consigan ingresar al mundo del trabajo con la formación y las competencias y de esta manera puedan realizar sus sueños y realizarse como personas.