(ANS – Roma) – La Asamblea Capitular está ya conformándose. En total los participantes al CG27 serán 220, de los cuales 207 capitulares y 13 invitados. La mayoría de ellos están llegando al «Salesianum» de Roma, mientras que algunos llegarán directamente a Turín, donde los Capitulares comenzarán la peregrinación en los lugares salesianos: Valsalice, Valdocco, Colle Don Bosco,San Giovannino.
A los Capitulares el regulador, el P. Francesco Cereda, hace llegar desde ya sus saludos en nombre del Rector Mayor, del Consejo General de de los Hermanos de la Casa Generalicia. Así escribe: «A todos ustedes, que llegan desde las más diversas partes de la Congregación y del mundo, doy la más cordial bienvenida. En el Capítulo pueden sentirse como en casa y en familia. La acogida, la cordialidad y la alegría van a facilitar la comprensión mutua, el compartir, la discusión y el discernimiento».
Es en los lugares salesianos donde tiene inicio el encuentro capitular: «Todos hemos nacido allí» (cf. Sal 86). Continúa el regulador: «Volviendo a la fuente del carisma salesiano, encontraremos a Don Bosco, nuestro querido Padre y Fundador. La primera y fundamental acogida nos la dará él mismo, junto a su IX Sucesor, Don Pascual Chávez. Los lugares, desde que tuvo inicio el carisma de Don Bosco y al que regresamos como hijos fieles, nos esperan: I Becchi y Valdocco, la Basílica de María Auxiliadora y la Basílica de Don Bosco. Son nuestros ‘lugares santos’. Aquí aprendemos a vivir en la familia y fortalecer nuestros lazos carismáticos».
Un período intenso espera a los Capitulares en Roma, un tiempo para «vivir y trabajar juntos» (C 49). El P. Cereda finalmente les da su augurio: «Espero que podamos vivir en estos días la alegría de nuestra vocación común y el interés por el bien de la Congregación; que podamos ya iniciar a ser testigos del Evangelio vivido radicalmente; que podamos caminar en el Espíritu y llevar el fruto del Espíritu: amor, gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio de sí (ver Gal. 5, 22); que podamos tener los jóvenes siempre con nosotros».
El tema del CG27 es vital para todos: para los hermanos, las comunidades y las Inspectorías; es un tema desafiante, que se enriquece con el testimonio de vida y de palabra del Papa Francisco; es un tema prometedor para los jóvenes, sus familias y laicos comprometidos con el espíritu y la misión de Don Bosco; es un tema atractivo que traerá credibilidad, visibilidad, y sobre todo fecundidad vocacional.