Cinco sacerdotes católicos, dos de ellos franceses, dos monjas y tres laicos son las víctimas de un nuevo episodio de violencia en Haití. La noticia fue anunciada por la Conferencia Episcopal local, destacando que los secuestradores exigían una suma de un millón de dólares por su liberación. El grupo viajaba por la zona al noreste de la capital, Puerto Príncipe, cuando se produjo el ataque. El Secretario General de la Conferencia de Religiosos Haitianos (CRH), el Padre Gilbert Peltrop, dio a conocer en un comunicado los nombres de las diez personas secuestradas. Los siete religiosos son el padre Evens Joseph, el padre Michel Briand (de nacionalidad francesa), el padre Jean Nicaisse Milien, el padre Joël Thomas, el padre Hugues Baptiste, la hermana Anne Marie Dorcélus y la hermana Agnès Bordeau (también francesa). Les acompañaron tres miembros de la familia del padre Arnel Joseph: su madre, Oxane Dorcélus; su hermana, Lovely Joseph; y su padrino, Welder Joly.
La larga crisis de Haití
El país caribeño, que ocupa cerca de un tercio de la isla de La Española, en las Antillas, atraviesa una grave crisis económica, política y social, que podría estallar en trastornos y giros autoritarios. Desde hace algún tiempo está cada vez más azotada por los secuestros y los crímenes violentos que tienen lugar en un clima de profunda perturbación causado en los últimos 15 años por huracanes, terremotos y epidemias. Se ha producido una emergencia humanitaria sin precedentes que aún perdura a pesar de la movilización de la comunidad internacional. En particular, el terremoto del 12 de enero de 2010 puso al país de rodillas. Aquel terremoto de magnitud 7 de hace más de 11 años causó al menos 200.000 muertos, cifra que según algunas estimaciones ronda incluso el medio millón de personas.
La exhortación de los obispos a reaccionar
Los siete clérigos fueron presuntamente secuestrados por una conocida banda criminal, según una agencia de noticias local. «La nación debe levantarse para luchar contra estos episodios», comentó el padre Gilbert Peltrop, secretario general de la Conferencia de Haití. El secuestro se produce menos de dos semanas después de que unos hombres armados secuestraran a un pastor y a otras tres personas. Haití tiene unos 10 millones de habitantes, de los que más del 70% viven por debajo del umbral de la pobreza. Se trata de uno de los países más pobres del continente, donde el tema de la migración es también un problema importante.
Un nuevo muro
Se calcula que hay 500.000 migrantes haitianos viviendo actualmente en la República Dominicana, la mayoría de ellos de forma ilegal. El Presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, anunció el mes pasado un plan para construir una valla de 380 kilómetros de longitud en la frontera con Haití con el fin de resolver los problemas de la inmigración ilegal, el tráfico de drogas y la circulación de vehículos robados. Ya existen barreras a lo largo de la frontera entre los dos países caribeños, que comparten la isla de La Española.
Fuente: Vatican News