(ANS – Nazaret) – No se puede realizar un servicio tan importante y delicado como el de guiar y acompañar a la Congregación Salesiana si no se tiene el cuidado especial de mantenerse espiritualmente “en forma”. Con este espíritu, y con el deseo de compartir una oportunidad de fraternidad y de auténtica vida comunitaria, el Rector Mayor P. Ángel Fernández Artime y los demás miembros del Consejo General iniciaron una peregrinación a Tierra Santa el pasado sábado 29 de junio.
El sábado aterrizaron al aeropuerto internacional de Tel Aviv, y los miembros del Consejo General se trasladaron el primer día a la casa salesiana de Nazaret. Estuvieron acompañados por el salesiano italiano Marco Rossetti, de la Facultad de Teología de Turín-Crocetta, del UPS; quien, en su saludo a los peregrinos, les dijo: “Algunos de ustedes ya han visitado estos lugares, otros se unen a ellos por primera vez, pero estoy seguro de que todos encontraremos nuevos mensajes, nuevas enseñanzas y, por qué no, nuevas emociones…”.
Ayer, domingo 30 de junio, el itinerario incluyó, entre otras cosas, un alto en la Basílica de la Anunciación de Nazaret y otra en el Monte Tabor. Además, los miembros del Consejo General, acogidos por el Inspector de Medio Oriente, P. Alejandro León Mendoza, pudieron disfrutar de la hospitalidad de la presencia salesiana en la ciudad, formada por los Salesianos y las Hijas de María Auxiliadora.
Hoy, 1 de julio, los peregrinos se encuentran visitando Cafarnaum, la casa de Pedro; Tagba, que alberga la iglesia del milagro de la multiplicación de panes y peces y la iglesia dedicada al Primado de Pedro; el Monte de las Bienaventuranzas; y finalmente cruzarán el lago de Tiberíades en barco.
Jericó y Betania serán visitadas mañana, 2 de julio, día en el que también habrá un encuentro con Mons. Pierbattista Pizzaballa, administrador apostólico del Patriarcado Latino de Jerusalén en Tierra Santa.
En los días siguientes podrán conocer y visitar el Santuario de la Visitación en Ein Karen, la Basílica de la Natividad en Belén; y en Jerusalén, el Muro del Llanto, el Cenáculo, el Huerto de los Olivos, la Basílica del Santo Sepulcro… Conocerán innumerables lugares para permitir a los miembros del Consejo General escuchar más la Palabra, acogerla con devoción y prepararse para la conversión continua, para el encuentro con Cristo en los sacramentos y con los hermanos y hermanas.
La peregrinación finalizará el próximo domingo 7 de julio, con una última parada en el Museo del Holocausto Yad Vashem, antes de regresar a Roma.
