«Jesús crucificado, fijo e inmóvil en la cruz, no por la fuerza de los clavos, sino por su amor infinito, es la prueba más linda del amor de Dios hacia el amado pueblo peruano.», es parte del mensaje que el Papa Francisco nos dirige en una carta dirigida al Arzobispo de Lima Carlos Castillo.
Palabras de aliento y misericordia en estos tiempos de pandemia.
A continuación la Carta: