En este séptimo día de novena, el padre Pablo Medina nos propone seguir caminando de la manera de María. Y nos presenta el aporte de nuestra fe en la construcción de una nueva ciudadanía, una ciudadanía activa, en salida. Hoy aprendimos a preocuparnos por el bien común.
Hoy, ante la crisis sanitaria del Covid 19, la ciudadanía requiere estar atenta, pensar en los demás y sobre todo en los más vulnerables, involucrarse, comprometerse. Así como lo hizo María en el evangelio de hoy, quien al formar parte de un fiesta y ver las necesidades que habían en ella, prepara la intervención, la ayuda. María nos enseña a ser parte de la realidad y el éxito o el fracaso de la reunión también para por la intervención de los invitados.
Eso lo podemos percibir hoy en día en nuestra sociedad. No estemos ajenos a los problemas que nos azotan. Entendamos que nosotros somos también parte de la fiesta y que el éxito está no en echarle culpa al que falló en la organización, sino organizarnos para que ocurra el éxito.
El padre nos invita a salir de este estado cómodo de dependencia de esperar que todo ocurra por el trabajo y el compromiso de otros, esa mala costumbre de tender solo la mano, esa torpe política de echar la culpa de todo lo que nos ocurre al estado. Salgamos al encuentro del bien común.