El Papa Francisco, es testigo del mensaje de salvación no sólo a través de su inmenso Magisterio, sino también, y propiamente, con su misma persona. La gente busca esperanza, la Iglesia brinda el auxilio siempre nuevo del Evangelio y el Papa da testimonio del mismo mediante un compromiso y entrega personal valiente y esforzada. Es “roca sólida” en medio de las sacudidas de la ideologías y confusión de valores en la agitación de las naciones.
El Papa Francisco no hace distinción de personas. Lleva el amor de Dios a todos sin excepción y ve también la miseria material en la que viven millones de inocentes. No quiere una iglesia indiferente, sino cercana. El Óbolo de San Pedro es una respuesta concreta para los más necesitados. Por medio de las colectas voluntarias se envían ayudas a todo el mundo. Se atienden a niños abandonados, ancianos olvidados, víctimas de guerras injustas y más 123 mil proyectos de ayuda en diferentes partes del mundo.
Los desastres naturales y las victimas a consecuencia de las guerras injustas se han convertido en un flagelo para la humanidad. El Papa Francisco quiere llegar a todas esas personas inocentes y para lograrlo necesita de tu apoyo. La Colecta para la Caridad del Papa es una oportunidad para practicar nuestra solidaridad con los más pobres en el mundo. Tu ofrenda o limosna es una gracia que Dios te concede para alcanzar la santidad amando al prójimo de verdad.
Todos los fondos recaudados a nivel nacional se depositan en la cuenta corriente del Banco de Crédito: Cuenta en soles 193-1448637-0-95 y Cuenta en dólares 193-1448557-1-97, inmediatamente son transferidos a la Santa Sede a través de la Nunciatura Apostólica en el Perú para que lo recaudado sea puesto a disposición de las necesidades más urgentes que la Iglesia identifica en los proyectos establecidos.
Invitamos a todos los cristianos y hombres de buena voluntad a unirse en esta cadena de solidaridad. Dando nuestra limosna al Óbolo de San Pedro, unimos nuestras manos en torno al Papa y en torno a Jesús que nos dijo: “Lo que hagas por el más pequeño de mis hermanos por mí lo has hecho”.
Si el 28 de junio te llega un sobre para la Caridad del Papa y una estampa dentro del sobre, la estampa es para ti y la cantidad monetaria la puedes introducir en el sobre, y dejarla en tu parroquia. El corazón del Papa queda en tus manos y tu corazón generoso llegará hasta un hermano pobre que haya en el mundo.
Fuente: Òbolo de San Pedro Peru.org