(ANS – Medellín) – La mañana del 31 de octubre, Don Ángel Fernández visitó Ciudad Don Bosco, una de las obras que atiende más niños y jóvenes en Medellín y que por sus programas de protección, educación para el trabajo y el desarrollo humano y formación profesional, se hace muy representativa para el cumplimiento de la misión de los hijos de Don Bosco, la de trabajar por los más pobres y vulnerables. La visita la hizo en el marco de la Fiesta Inspectorial COM, que se realizó en dicha institución.
En el saludo inicial el Rector Mayor, expresó que se sentía feliz de estar en otro «Valdocco», porque así puede llamarse el lugar donde «el muchacho o la muchacha, el niño o la niña se siente feliz, cómodo, como en su otra casa y donde puede desarrollar su capacidad de relacionarse con los otros”. Posteriormente realizó un recorrido por el lugar, donde pudo conocer niños, jóvenes y adolescentes de cada uno de los programas, quienes le mostraron sus talentos con bailes y representaciones, o con otras muestras artísticas como pinturas, fotografías y manualidades.
Hubo tiempo para preguntas y conversaciones muy cercanas con chicos desmovilizados del conflicto armado y para conocer las realidades de muchos otros, que le abrieron el corazón al X Sucesor de Don Bosco, para mostrarle lo felices que se encuentran en el lugar y lo mucho que han aprendido (Galería de la visita CDB).
A continuación se celebró la Eucaristía de conmemoración de los 100 años de la presencia salesiana en Medellín y los 50 años de ciudad Don Bosco, en la que además se reconoció a los Religiosos que cumplían 25 o 50 años de Profesión Religiosa u Ordenación Sacerdotal. En su homilíaDon Á.F. Artime dejó tres mensajes claros:
- Invitó a todos los salesianos a “ser fieles a Dios y a continuar el sueño de Don Bosco para que la presencia perdure” y les expresó su satisfacción al ver que se puede trabajar en compañía de empresas civiles por el mismo bien común.
- A los educadores y educadoras les agradeció su trabajo corresponsable, ya que“juntos (laicos y religiosos) se pueden lograr grandes cosas”, pues reconoce que el bien que se hace hoy y la fuerza que tiene el trabajo de la congregación es posible gracias a la unión. Solicitó además, que se«mire con la ternura de Dios a cada niño» para poder como institución cambiar la realidad.
- Con los jóvenes fue claro y contundente:“les pidió terminar los estudios, sentir a Ciudad Don Bosco como una casa y guardar los valores recibidos en su formación para ser felices, así como compartirlos con los demás”.
Luego de la Eucaristía se compartió un almuerzo con miembros de la Familia Salesiana y finalmente, como parte de la Fiesta Inspectorial, el P. Ángel se reunió con todos los sacerdotes, coadjutores y formandos de la Inspectoría para entregarles su mensaje. (Galería Eucaristía).
Fuente: Salesianos Medellín.