Jovani Chávez tiene 16 años y se prepara para poder vivir de forma autónoma tras haber sufrido maltrato y abandono durante su infancia. Gracias a los Salesianos de Ecuador ha podido estudiar y ahora tiene la suficiente confianza en sí mismo como para afrontar cualquier reto que se le presente.
De pequeño vivió en Quito junto a sus padres, pero su madre abandonó el hogar cuando tenía 5 años. La inestabilidad y alcoholismo de su padre lo convirtieron en una persona violenta, por lo que Jovani ingresó en un centro de acogida temporal, donde recibió apoyo psicológico y seguimiento.
Hace cinco años el joven había vuelto a la calle, así que fue remitido por orden judicial a la Casa de Acogida Granja Don Bosco en Ambato. Gracias al Proyecto Salesiano Ecuador Jovani volvió a estudiar, recibió una alimentación adecuada, ayuda psicológica y comenzó a vivir en un ambiente seguro y familiar junto a otros jóvenes en similares circunstancias.
En la actualidad estudia el segundo año de Bachillerato en un colegio a distancia, practica artes marciales y es un ejemplo para los demás niños. Jovani destaca que, gracias a los Salesianos, “he aprendido a conocer valores que no aprendí en mi casa y mucho menos en la calle”.
Jovani también tiene una vinculación laboral en la Asociación de Limpieza en Mercados Municipales, donde tiene un contrato y cumple con responsabilidad con sus obligaciones a la vez que adquiere madurez en sus tareas, en el trabajo en equipo y en la administración del dinero que gana siempre con el acompañamiento escolar, laboral y psicológico del Proyecto Salesiano Ecuador.
En la etapa final del proceso que sigue con los Salesianos, Jovani se ha dado cuenta de que es el protagonista de su futuro: “Quiero continuar con el entrenamiento de artes marciales, graduarme en educación física y formar una familia… A veces me pongo triste cuando pienso en todo lo que me pasó antes de llegar aquí, pero veo que la vida me ha dado otra oportunidad y trato de aprovecharla al máximo”.
Fuente: Misiones Salesianas
