Tim Harris es el dueño de “El Lugar de Tim” (TimsPlaceAbq.com) el único restaurante en el mundo de propiedad de una persona con Síndrome de Down. Situado en Albuquerque, Nuevo México, está abierto los 7 días de la semana.
«Es el sitio más feliz del mundo. Es un restaurante de desayunos, almuerzos y abrazos. Los abrazos son la mejor parte”, explica su dueño.
Todos los días, Tim se levanta a las 5:30 de la mañana y camina 7 manzanas para llegar a su local. “Me emociona mucho ir al trabajo así que bailo en el aparcamiento. Es un baile de magia”, cuenta emocionado.
“El Lugar de Tim” es un sitio especial. El chico recibe personalmente a sus clientes, les pregunta por su vida, se ocupa del personal y las frases de ánimo y de felicitación a sus empleados son constantes.
Tanta es su preocupación por los abrazos que incluso ha instalado un contador oficial de abrazos que refleja el número de ellos que da cada día.
“Mi mayor preocupación es la gente que entra por la puerta. A veces mis clientes están tristes, pero les doy un abrazo y se sienten mucho mejor. Los abrazos son mucho más potentes que la comida”, resume Tim.
Este joven supo desde pequeño que quería tener un mesón. Gracias a la ayuda de sus padres, pudo cumplir su sueño. “Cuando tenía 14 años dijo que quería ser dueño de un restaurante. Con el paso del tiempo, empezamos a tomarle en serio”, afirma su padre. “Estoy orgulloso de mi hermano, las metas que ha conseguido en su vida… Quiero decir, hay gente que solo puede soñar con cosas como esta”, continúa su hermano.
Tim es feliz regentando su restaurante. Es el sueño de su vida. “No dejé que mi discapacidad acabara con mis sueños. Las personas con discapacidad pueden conseguir cualquier cosa que se propongan. Somos regalos para el mundo”, concluye sonriendo.
Fuente: Religión en Libertad