Los encuentros vocacionales siempre generan esperanza de continuidad, pero cuando estas experiencias se viven con rostros alegres, hay más certeza de un futuro prometedor donde quiera que vayan los jóvenes participantes.
Los encuentros vocacionales siempre generan esperanza de continuidad, pero cuando estas experiencias se viven con rostros alegres, hay más certeza de un futuro prometedor donde quiera que vayan los jóvenes participantes.