Entre las delegaciones políticas más significativas en la ceremonia de inicio de pontificado del Papa Francisco se encuentran la de Argentina, encabezada por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, con 19 personas; y la de Italia, encabezada por el presidente de la República, Giorgio Napolitano, y el primer ministro Mario Monti, con los presidentes del Senado y la Cámara de la Corte Constitucional, con 16 personas.
También se encuentra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro y el vicepresidente de Cuba, Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez.
Los Príncipes de Asturias presiden la delegación española, de la que también forman parte el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los ministros de Interior, Exteriores y Justicia, Jorge Fernández Díaz, José Manel García Margallo y Alberto Ruíz-Gallardón.
En total, hay seis soberanos reinantes. Concretamente, asisten el Rey Alberto de Bélgica, el Príncipe de Mónaco, Alberto II; el gran duque de Luxemburgo Henry de Lux; el copríncipe soberano de Andorra, monseñor Joan Enric Vives; el príncipe Alois de Liechtenstein; y de la Orden de Malta, el Príncipe y gran maestro Fra´ Andrew Festing.
Además, acuden tres príncipes herederos, entre ellos, Felipe de Borbón; el príncipe de Holanda, Willem Alexander, al que acompaña la princesa consorte, la argentina Maxima Zorraguieta, así como el príncipe heredero de Bahrein Sheik Abdullah bin Haman bin Isa Alkhalifa. Junto a ellos, acuden 31 Jefes de Estado o de Organizaciones Internacionales, 11 Jefes de Gobierno (Alemania, Francia, España y el vicepresidente de Estados Unidos) así como delegaciones encabezadas por primeras damas, vicepresidentes, vice-primeros ministros, presidentes del Parlamento, ministros, embajadores y otros dignatarios.
El Papa Francisco saluda a los jefes de las 132 delegaciones oficiales en el interior de la Basílica de San Pedro del Vaticano, tras finalizar la Misa.
Así, tras la ceremonia, el Pontífice acudió a la sacristía a despojarse de las vestiduras litúrgicas, después de la Misa y sin realizar el rezo del Angelus.
Posteriormente, acudió al altar central de la Basílica para saludar a los jefes de las 132 delegaciones oficiales de los diferentes países que han viajado a Roma para participar en la ceremonia. A la conclusión de este acto, el Papa fue a la casa Santa Marta para el almuerzo.
El resto de las delegaciones que se quedan en Roma y han solicitado encontrar a algún representante de la Santa Sede, se reunirán el miércoles con el Secretario de Estado, el cardenal Tarcisio Bertone y el Secretario para las Relaciones con los Estados, el Arzobispo Dominique Mamberti, entre ellos, la presidenta de Brasil, Dilma Roussef, como motivo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que se celebrará en Río de Janeiro en julio de 2013.
Además, el Papa Francisco encontrará a las 11.00 horas del miércoles 20 de marzo en audiencia, en la Sala Clementina, a las delegaciones de las Iglesias y comunidades cristianas y de otras religiones.
Artículo publicado en religionenlibertad.com