(ANS – Città del Vaticano) – La Iglesia verá pronto canonizado al Beato Luigi Guanella, uno de los “Santos de la caridad” del Turín del siglo XIX. Un santo que ha unido su vida a la de Don Bosco.
Jueves 1º de julio, Benedicto XVI, en el curso de una audiencia concedida al Prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el arzobispo Angelo Amato, ha firmado la promulgación de los Decretos que se refieren también al reconocimiento de los milagros para cuatro futuros beatos y el martirio de numerosos sacerdotes, religiosos y religiosas muertos en gran parte durante la Guerra civil española y bajo el régimen nazi en Alemania.
Don Bosco, don Guanella, don Orione.
Para la Iglesia el período que va desde finales del Ochocientos a los inicios del Novecientos ha sido un período exultante. No hay casi parte de Italia y de mundo que no esté afectada directa o indirectamente por la caridad de estas extraordinarias figuras de sacerdotes.
Don Guanella era natural de una localidad cerca de Sondrio, donde nace en 1842. Ordenado sacerdote, se dedicó con mucho celo a los jóvenes ocupándose de la escuela y revitalizando la Acción Católica. Encontró a Don Bosco en Turín dejándose implicar en su ola de caridad. En 1875 se hace salesiano; se ocupa del Oratorio “San Luís” de Turín y poco después es nombrado director del colegio “Dupraz” en Trinidad, en la provincia de Cuneo. A los tres años es reclamado por el obispo para la diócesis. En 1881, funda los Siervos de la Caridad y las Hijas de Santa María de la Providencia que desde Como se difunden pronto por el resto de Italia y más allá, por América, Asia, áfrica.
En enero de 1915, el área de Marsica en Abruzzo sufre la devastación de un dramático terremoto. Don Guanella está allí llevando socorro y a su lado está Don Orione. Pocos meses después se consume en Como. Paolo VI lo proclama Beato en 1964.
