Esta es el lema del mes de María Auxiliadora 2013, que recoge aquella frase que le dijera Don Bosco a un desalentado Miguel Magone y quien pasó de ser pandillero a un modelo para el oratorio.
Los Miguel Magone
Hoy en día existen muchos Miguel Magone en nuestra sociedad e incluso en nuestra propia Familia Salesiana. Jóvenes incomprendidos, muchas veces, que no creen en la Iglesia y que se les hace difícil mantenerse en el camino de la Fe. Pues a ellos va este mensaje como una invitación a volver la mirada a aquella Madre que siempre nos espera con los brazos abiertos para llevarnos a la verdadera felicidad que está en su Hijo Jesús.
Por ello invitamos a cada uno de los miembros del Mundo Salesiano para que nos ayuden a llevar este mensaje mariano a aquellos niños, adolescentes y jóvenes que necesitan una palabra de aliento en el caminar de la vida.
Los jóvenes se los agradecerán.