(ANS – Treviso) – Una de las siete obras de misericordia corporales reza: «visitar a los presos»; por ello, en el Jubileo de la Misericordia, un grupo de muchachos del centro salesiano de San Dona di Piave han visitado a presos jóvenes en la Penitenciaría de Menores de Treviso. «Tenía que ser una simple tarde para compartir, en lugar de ello hemos descubierto grandes cosas” – comentó uno de los animadores del oratorio que ha participado de esta bella iniciativa.
Por: Alessia Pavan
“Para animar el encuentro, bastó solamente un juego de mesa y un poco de la alegría típica de los oratorios salesianos – dijo el P. Lorenzo Piola, promotor de la iniciativa – El sistema preventivo que ha creado Don Bosco conocido en todo el mundo, nació a raíz de una visita a las cárceles de Turín”.
Durante la visita, había educadores, voluntarios y guardias de la prisión, pero el ambiente ha estado sereno.«Me parece imposible – dice Julia, estudiante de último año de la escuela – que mis compañeros han tratado con el mundo de la prisión. Luego, cuando vi jugar ping-pong, exactamente como lo hacemos en la oratorio, el miedo se ha ido, y durante toda la tarde, nunca me he preguntado cuál era el delito que habían cometido. Éramos dos mundos que se han encontrado y nos descubrimos que no estamos tan lejos. Quizá nuestra historia personal influye en nuestras decisiones. Me pregunto qué es lo que los llevó a terminar allí».
La eficacia educativa de estas iniciativas depende siempre de la actitud de los que vienen a visitar, pero los chicos de San Dona parece que han traído el estilo correcto, de modo que los mismos presos jóvenes han manifestado al P. Marco Di Benedetto el capellán «Que cuando vuelvan, sean ellos mismos».
Publicado el 18/01/2016