New York (Agencia Fides) – Acaba de concluir el encuentro “La educación no puede esperar”, un evento organizado por segundo año consecutivo durante la Asamblea General de las Naciones Unidas. Según cifras dadas a conocer por la organización 28 millones y medio de niños que viven en países afectados por conflictos no tienen la posibilidad de ir a la escuela. Los líderes de los gobiernos y los de las organizaciones internacionales reunidos han solicitado una acción inmediata para remediar el problema. Más de la mitad de los 57 millones de niños en edad escolar que no tienen acceso a la educación viven en países donde hay guerra y destrucción. Los conflictos, enfrentamientos y desplazamientos en países como Siria, República Centroafricana, Malí y la República Democrática del Congo, han contribuido en gran medida a incrementar este fenómeno.
En la actualidad, hay cerca de un millón de pequeños refugiados sirios. “La educación no puede esperar a que se ponga fin a las guerras o a que se resuelvan los desastres, ni a que haya fondos disponibles”, dice la directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), que ha instado a todos a una intervención inmediata para ayudar a los niños que no tienen la posibilidad de recibir educación. Una educación de calidad requiere inversión y planificación que de a los pequeños que viven en las partes más difíciles del mundo una esperanza y una oportunidad para un futuro mejor. (AP)