Debido a la ola delincuencial en la Región Callao, el gobierno peruano declaró en Estado de Emergencia el primer puerto. En esta situación todos los ciudadanos pierden sus garantías constitucionales, y los niños no entienden nada de esto, solo ven por sus barrios tanquetas militares, policías, y ahora de vez en cuando intervenciones domiciliarias, un ambiente siempre de escenarios violentos.
Puerto Nuevo es uno de los barrios más peligrosos del Callao y no se exime de estos procedimientos. Pero sin embargo, ante esta situación difícil y desafortunada para la mayoría de los pobladores el Oratorio “Don Bosco Puerto Nuevo” o conocido también como la Casa de los Jóvenes, continua trabajando con el mismo cariño y amor para sus niños y jóvenes, que asisten para divertirse y pasar una tarde de verdadera amistad.
Son siete los colaboradores que trabajan en diversos talleres, apoyan a los niños en sus tareas, promueven habilidades y destrezas, brindan orientación y son amigos de todos ellos.
«El pasado miércoles 23 de diciembre se realizó la clausura del Oratorio, donde atendimos a 120 niños. Entregamos diplomas de los diversos talleres, ellos se fueron muy felices con sus regalos. Les inculcamos los verdaderos valores de la Navidad, la verdad, la honradez, la amistad, el amor y el respeto a los demás” nos comenta Rolando Olortegui- Coordinador del Oratorio.
Este oratorio que fue fundado por el padre salesiano Marino de Pra tiene como objetivo mantener el tiempo libre de los niños y jóvenes en diversos talleres y espacios de recreación. Talleres de música: orquestina, guitarra, órgano, vientos; talleres de comunicación, matemáticas, computación, juegos lúdicos, acompañamiento psicológico, que sirven como herramientas y sustento para proyectarse al mundo.
“Es una tarea que está llena de esperanza y optimismo tratándose de niños y jóvenes que se dejan orientar brindando una educación religiosa y con valores como lo enseñó Don Bosco” -continua Rolando-.
Antecedentes
Debido a la exposición de minerales, sobre todo el plomo y actividades delictivas que se dan a diario en las calles de Puerto Nuevo, los niños presentaban fuerte problemas de aprendizaje. En ese sentido, y gracias al apoyo de estas instituciones, alrededor de 80 jóvenes ha tenido la oportunidad de contar con profesionales especialistas que los han acompañado en talleres de psicopedagogía, taller de comunicación, lógico matemático, comprensión lectora; así como talleres de música y danza, que les han permitido trabajar en sus habilidades sociales y mostrar mejorías.
Informó: Mirko Liñan, Comunicador Salesiano